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Arroba

miércoles, 28 de agosto de 2013

Arrancad las semillas, fusilad a los niños de Kenzaburo Oé.



Siguiendo el criterio de lectura de premios Nobel, si hace unas lecturas me decidí por el primer japonés que lo ganó, ahora es el turno del segundo, y en este caso, también he elegido su primera novela.
A pesar de que la historia es bastante cruda, tiene en cierta manera una semblanza a "El señor de las Moscas" y la sociedad descrita parece que se trate de una novela distópica, aunque me temo que lo que se describe debe ser muy próximo a la realidad japonesa durante la Segunda Guerra Mundial, la novela no me acaba de convencer, no consigue dejar una huella excesivamente grande en el lector,
Estoy completamente convencido que esta no es ni mucho menos la mejor obra de este autor ( o al menos eso espero !!!) , pero a diferencia de Kawabata no me deja entrever los placeres literarios que me esperan en sus obras más reconocidas por el público y crítica.

No va a ser un autor que esté en los primeros lugares de mi lista de pendientes futuros y cuando me decida esta vez me informaré de cuales son sus novelas más recomendadas.
La novela se deja leer, es relativamente amena, pero al menos yo, espero mucho más de un premio Nobel, nada que ver con Kipling,  Thomas Mann, Hemingway, Camus o el mejor de todos, García Márquez por citar algunos.
Así pues este libro no lo recomiendo, seguro que pueden encontrar por ahí novelas que valgan mucho más la pena, pero no puedo dejar de tener mis dudas a futuro y estoy seguro que le daré otra oportunidad a este escritor.


Nos vemos en Twitter: @Malime_2010 Si te interesa conocer mi novela Malime, aquí puedes descargarla

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